A MALOS TIEMPOS BUENOS CUIDADOS

Y el primer cuidado en toda la regla debe ser el de nuestra piel…

En casa…

En el Centro de estética…

En el quirófano…

¡¡Donde sea!!!…

Porque  ella es el “abrigo de la belleza” y difícilmente podremos estar guapos sin su colaboración…

Pero ¿Entendemos su funcionamiento?…

Os cuento…

Los sistemas de defensas naturales cutáneos juegan un papel importante en la protección contra los riesgos ambientales.

–El nivel fundamental es el de la barrera protectora de la misma piel, que impide la penetración de agentes nocivos.

-El segundo incluye  los sistemas antioxidantes y de reparación.

-El tercero, sumamente crítico, es el inmunológico.

Se trata de una compleja organización de células altamente especializadas que identifican a los “invasores” potencialmente peligrosos y los señalan para que sean destruidos en el torrente circulatorio por otras células especializadas.

Esos invasores pueden ser bacterias, virus e incluso células cancerígenas….

Pero el envejecimiento, el estrés crónico y los rayos ultravioleta pueden desactivarlos todos.

Y encima, los dermatólogos han descubierto recientemente que los productos cosméticos, incluyendo los que contienen un alto Factor de Protección Solar, no son casi nunca lo bastante eficaces para prevenir totalmente estos daños, sobre todo aquellos que afectan el sistema inmunológico…

La inmuno supresión, o descomposición del mismo puede dar lugar a una vasta gama de efectos nocivos, desde una exagerada susceptibilidad a las infecciones, hasta el desarrollo del cáncer de piel.

Y a diferencia del eritema o enrojecimiento, causado por la exposición a los rayos UVB, en estas situaciones no hay signos visibles que nos avisen que está ocurriendo un daño.

Así que jamás me cansare de recomendaros:

¡¡¡Precaución!!! Con los rayos solares…

Que en el invierno, en la nieve, pueden incluso ser mas dañinos que en la playa…

¡Reaplicar los protectores cutáneos cada hora!… y o olvidar jamás la hidratación a fondo