No al aspecto de cansancio
Pero no debemos permitirnos el lujo de mostrar un aspecto cansado…
Y es que podemos evitarlo con relativa facilidad.
Os cuento como…
Con la ayuda de:
-Baños relajantes con unas gotitas de aceite esencial de romero o de menta (que también se pueden aplicar detrás de la nuca y en las sienes).
Combaten las tensiones acumuladas durante la jornada.
-Automasajes de píes.
Contra los pies fatigados lo mejor es un masaje con un producto especifico de piernas cansadas.
Se lleva a cabo rodeándoles con las manos y presionándoles con los pulgares.
Después se toman uno a uno los dedos y se les estira hacia arriba con suavidad.
Hay que finalizar practicando movimientos ligeros ascendentes, de los tobillos a las rodillas
-Sueño relajante…
Para dormir mejor conviene mantener en la medida que sea posible, una temperatura agradable en el dormitorio y subir las piernas por encima del cuerpo con la ayuda de almohadones.
Así favorecemos la circulación de retorno.
-Olor corporal agradable…
El desodorante borra las huellas del sudor, que a veces tiene mucho que ver con el agotamiento.
Aplicándolo tras el baño sus beneficios se potencian al máximo, siempre y cuando no se mezcle con el perfume.
-Relax con toallas calientes…
Y cuando no hay tiempo para un masaje, podemos obtener grandes efectos de relax poniendo dos minutos en el micro-ondas una toalla (pequeña) mojada.
La retiramos cuando esta tibia y nos envolvemos con ella las manos hasta que se enfría.
Y de vez en cuando, una visita al centro de Estética
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